¡El nene crece!

El nene está cambiando tanto que me asombra. Le miro, me mira y le descubro un nuevo brillo, un nuevo entendimiento. Se llena su cerebro por momentos, Tiene razón su madre en cantarle, contarle cosas, hablarle en Inglés y jugar todo el rato. Yo no hago eso. Sólo le cuido y le entretengo torpemente, pero con mucho cariño. No se si eso le servirá para su progreso que es tan rápido, creo que me dejará atrás para buscar estímulos en cada sitio  que ve o en cada objeto que se le pone cerca, en las canciones de su madre, en los movimientos y sonidos de su padre.

El nene me emociona cada día más. Tiene su preciosa carita tan especial, pero si fuera otra carita ¿No sería lo mismo? "¡Claro que sí, tonta, recuerda a tus hijos, tan preciosos para ti, como los mirabas incrédula de ver tanta preciosidad en sus tiernas caritas!"

¡ Cómo aprende todo! ¡ cómo ha desarrollado sus habilidades! Me parece todo nuevo, cómo si no lo hubiera vivido antes y comprendo la ilusión de mi hija al mirarle, al verle crecer y sonreír; al verle tratar de  emitir sus mejores sonidos para hacerse entender. Dentro de poco comerá solo, después, dirá alguna palabra y mas tarde caminará y se irán borrando éstas primeras emociones, por eso las escribo. No quiero que se escapen nunca. Ahora estoy emocionada. Espero que no se vaya nunca éste sentimiento de mi corazón de abuela.