He paseado por la ciudad, callejeando y no me acaba de gustar lo que veo.
Se que no puedo encontrar cosas maravillosas, porque estamos en "crisis" y no creo que cambiemos en largo tiempo.
Me perdí y quise atajar hacía donde iba. Noté que las calles del centro que no son principales, son..., no se...tristes y grises.
Apenas hay tiendas y las que vi, son bazares chinos en pequeños locales. Muchas antiguas tiendas están cerradas esperando un alquiler, supongo, que será chino también.
En otra época de austeridad de las que ya hemos vivido muchas,había tiendas de todo. Existía un pequeño comercio, de lo más variado: zapaterías para arreglar calzado, tiendas de ropa interior; pequeñas tiendas de papelería y juguetes, reducidos estancos, droguerías y perfumerías, relojerías, kioscos de periódicos, pastelerías.
Eso y más, se encontraba en cada calle, pequeña o grande. Siempre encontrabas personas que entraban y salían, señoras humildes con bolsa de compra, otras muy arregladas, con sus libros de misa, estudiantes, chicos de recados, trafico de furgonetas que descargaban, en fin, era la vida de la ciudad y te gustaba vivírla y pasearla, mirándolo todo.
Las calles están vacías de contenido y no podemos echarle la culpa a los chinos, porque si no estuvieran ellos, ¿qué quedaría?
Las avenidas importantes, de las que hablaré otro día, están llenas; hay comercio, turistas y souvenirs. Las transversales y menos interesantes, son zonas de pasar rápido sin detenerse, porque no hay nada que hacer en ellas.
La capital es hermosa, pero, repito, callejeando no me gustó lo que vi, quizá no supe mirar bien.
Amiga Chelo, cuánta razón tienes, es triste pasear por el centro, hay callejuelas que da hasta miedo pasearlas, y ese Madrid de los Austrias se cae a trozos.
ResponderEliminarQue queda de nuestro Madrid castizo, de nuestros barrios llenos de vida, y las corralas, ya nada está para ser visto por turistas, ni si quiera para los que vivimos aquí y que siempre lo vimos maravilloso.
Y los bazares chinos ¿qué pasa con ellos? A mí que me gusta que la gente viva y tenga trabajo, me siento invadida, siento que se quedan con los mejores locales, después no pagan y no pasa nada, se marchan a otro y nada es importante.
Lastima de nuestro maravilloso Madrid, que ha quedado invadido, no por los franceses, si no por los chinos “honorables” que se van quedando con todo lo mejor, será la crisis o que ya estamos artos y hemos tirado la toalla. Un beso amiga, tus fotos me han encantado.
Han hecho algunas cosas interesantes en la ciudad, pero el Madrid, para vivirlo, la ciudad que contenía todo, se convierte en Museos y restaurantes turísticos, poco a poco. Un beso
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