Dulce Navidad en los escaparates |
Así debería estar el tiempo.
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No nos damos apenas cuenta pero pasa el tiempo volando. Todos los días aparecen programados. ayer al médico, mañana limpieza, pasado clases, al otro clases, entre medias, comprar. Comidas con compañeros y cenas, Parecía que no celebraríamos ninguna, pero todo el mundo quiere reunirse, yo no lo entiendo, ¿Qué pasará en enero, ya no nos veremos más con amigos?
Mientras tanto todo se aproxima, y el árbol sin poner aún. Me pondría ahora, pero me duele la espalda y estoy cansada
La cena la tengo resuelta: Un pavo asado. Da mucha guerra pero es lo único que me ha tocado hacer. No tendré que pensar.¡Bien!
Debería hacer un montón de llamadas a los parientes mas alejados al menos, pero , ¿Cuando? A mí me llamó todo el mundo el lunes cuando iba a salir, ya no pude ir a comprar, porque fue una mañana de teléfono. Si yo llamo, seguro que me odian en vez de alegrarse, por entretenerles.¡Todo el mundo está tan liado!
¡Esto es La Navidad! ¡Madre mía!
¡Calma , calma, el día tiene las horas que tiene!. Vamos a programar las actividades justas, ni más ni menos.Ya comeremos y nos veremos cuando pase el desbarajuste. Ya limpiaremos y ordenaremos. Mientras a vivir la Navidad y a disfrutar de los nuestros.