Volver a ver con ilusión el paisaje |
Me gustaría contar algo extraordinario cada día. No suelen ocurrir muchas cosas en mi entorno, pero a veces si que se podía decir que las hay, aunque sean pequeñas.
Hoy asistí a la espera del resultado de una operación. Todo fue bien a pesar de que pasar por un quirófano no está exento de riesgos.
Mi familiar está muy bien y animado.
En la sala de espera, los nervios estaban desatados, en el ambiente había un disimulado temor que nadie de la familia quería mostrar. Hablábamos sin parar de las cosas mas superfluas: las últimas vacaciones, las fiestas familiares y otros acontecimientos cotidianos.
Poder disfrutar de flores y árboles |
Todos notábamos a nuestro corazón latir más rápido de lo normal.
Cuando un joven cirujano nos llamó, las dudas todavía nos aleteaban por nuestra mente. hasta que rompió a hablar y contó el proceso con resultado satisfactorio, no apartamos la tensión de nuestro cuerpo.
Afortunadamente al día siguiente, salíamos hacia nuestra casa con el ánimo de conseguir una tranquila y rápida recuperación.
Quizá es algo normal, pero en nuestro interior, sentimos ¡algo extraordinario!
Dar largos paseos |